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¿Para qué y por qué? 

Las mujeres nasas podamos vivir en un territorio sin violencia y se pongan en práctica nuestra leyes espirituales y materiales que son fundamentadas en el cuidado de la madre tierra, en la dualidad del sentir y pesar de cada mujer y hombre. 


 En la actualidad se presentan desarmonías sobre las violencias de todo tipo contra las mujeres, se cuenta con pocas oportunidades para la organización entre mujeres perdida de prácticas culturales, no se ha dado un acompañamiento efectivo en la justicia, falta de oportunidades de formación, económicas y laborales, poca formación y participación política, no se evidencia procesos de formación desde lo propio, falta de fortalecimiento de procesos autónomos del Plan de Vida, debilitamiento de los valores familiares del pueblo nasa, falta de acceso a la tierra para las mujeres, no se cuenta con espacios propios seguros y adecuados para el movimiento de mujeres, la atención psicosocial es deficiente para las mujeres, no hay un reconocimiento de la sabiduría ancestral de las mayoras, no hay programas efectivos para la salud sexual y reproductiva, necesidad de migración de las mujeres a las ciudades por falta de oportunidades en el territorio, propagación de cultivos de uso ilícito, reclutamiento de jóvenes a grupos armados, consumo de sustancias psicoactivas. 

  
hacia la mujer como maltrato físico, dependencia económica, la perdida de la identidad del ser mujer nasa, falta de oportunidad en el acceso a la educación superior, madre cabeza de familia con bajos recursos económicos, violencia intrafamiliar y la globalización trae consigo cambios que han ido permeando las raíces ancestrales del ser mujer. Además, las consecuencias del conflicto armado dejan el tejido social deteriorado

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